Fiscalía pidió precluir investigación contra ministro Antonio Sanguino por el ‘carrusel de la contratación’

En la tarde del lunes 26 de mayo se llevó a cabo una audiencia contra el ministro de Trabajo, Antonio Sanguino, por un presunto tráfico de influencias que se habría cometido en su paso en el Concejo de Bogotá y que está relacionado con el escándalo del ‘carrusel de la contratación’.

No obstante, la Fiscalía pasó de acusarlo a solicitar la preclusión parcial, ya que uno de los hechos imputados ya está prescrito.

El fiscal Jorge Velásquez solicitó a la Sala de Primera Instancia del Tribunal Supremo de Justicia que se desestime el escrito de acusación presentado por el ente investigador el pasado octubre de 2024.

El juicio también mostró conflictos entre la Sala y la Fiscalía, en donde la Corte le pidió más claridad al fiscal Velásquez sobre sus decisiones.

Este giro sorprendió hasta al mismo ente acusador, ya que fue la Fiscalía la que acusó a Sanguino, pese a que el fiscal encargado del caso cambió. Esto último debido a que al ser nombrado como ministro de Trabajo, el caso pasó a ser manejado por un fiscal delegado ante la Corte Suprema, quien pidió la preclusión.

Cabe recordar que Sanguino es investigado, ya que habría presionado, presuntamente, al secretario de Salud, Héctor Zambrano, para que nombraran a Liliana Paternina como gerente del Hospital de Usme.

El fiscal comunicó a la Corte que, por lo tanto, Sanguino solo podría ser juzgado por su posible influencia sobre la gerente del hospital para que Julio Gómez asumiera el contrato, comportamiento que ocurrió en 2009 y que también estaba a punto de prescribir.

La razón sería que ya han pasado los 12 años que son la pena máxima del delito de tráfico de influencias, en este caso serían ampliados a 16 por tratarse de funcionario público.

“La calificación jurídica que ha hecho la Fiscalía anticorrupción es inflada, con el objetivo de subirle a la prescripción de la que la misma Fiscalía es culpable. Hay una nulidad porque a pesar de que la conducta que se le atribuye a mi representado como delito continuado, eso se hizo para huirle a la prescripción. Tendrían que haber imputado cohecho impropio y no lo hicieron”, fue uno de los argumentos de Andrés Cárdenas, abogado de Sanguino.

Frente a esto, el Tribunal Supremo de Justicia debe resolver la petición y convocará a una nueva audiencia para dar a conocer su fallo.