Exclusivo: Habla novio de Sirley López, la estudiante que fue asesinada en la sede de la Universidad del Valle en Palmira

“Como un solecito, una persona que daba color”, recuerda Michel Muñoz a Sirley Vanessa López, la joven estudiante de la Universidad del Valle, sede Palmira, que murió este domingo, 11 de mayo, tres días después del ataque armado que un hombre perpetró en la institución sobre las 6:00 de la tarde del pasado jueves.

Michel, estudiante de séptimo semestre de Psicología en la sede universitaria y pareja sentimental de Sirley Vanessa, cuenta que ambos estaban en la cafetería del plantel cuando un hombre llegó al lugar y accionó un arma de fuego.

A raíz de este ataque, también resultó herida María José, estudiante de Contaduría Pública en la misma sede universitaria y quien permanece bajo observación médica.

“Creo oportuno mencionar que Sirley no era amiga de María José como se ha dicho. Ellas no se conocían, nosotros estábamos en una mesa aparte a unos dos o tres metros y lastimosamente una bala perdida alcanzó a Sirley”, aclaró Muñoz en diálogo con El País.

A su vez, detalló que en la institución no había personal de salud que pudiera prestarles atención inmediata a las estudiantes, dado que el servicio de enfermería está activo aproximadamente hasta las 5:00 de la tarde.

“Cuando sucedió el tiroteo preguntaban si había un médico, pero no había porque ya se habían ido, los servicios no se mantienen hasta la nocturna y hasta que no pasa algo así lastimosamente no se actúa”, enfatizó.

De acuerdo con su relato, ante la urgencia, optaron por trasladar a su compañera sentimental en un vehículo particular porque la ambulancia no llegó rápido. Mientras tanto, la otra estudiante herida tuvo que esperar media hora más por la llegada de un vehículo de servicio médico.

“Yo estaba con Sirley en todo momento, pero si yo me pongo a esperar que llegue una ambulancia, ella se muere dentro de la Universidad esperando a que llegue la ambulancia”, narró Michel.

Aunque el caso está siendo investigado por las autoridades, la comandante de Policía del Valle del Cauca, la coronel Sandra Liliana Rodríguez indicó que el agresor, identificado como Brayan Tovar y quien se quitó la vida luego de perpetrar el ataque, sería la expareja de una de las jóvenes.

Esta versión fue confirmada por estudiantes de la Universidad del Valle, quienes aseguran que Tovar no solo sería la expareja de María José, sino que también era un estudiante inactivo de la sede y no una persona ajena a la institución de educación superior como se ha dicho en los últimos días.

“No era un desconocido y un externo, él no era estudiante activo, pero lo fue”, señaló Michel sobre Tovar. Según esta versión, el hombre fue estudiante del programa de Contaduría Pública en el plantel hasta el año 2023.

¿Quién era Sirley Vanessa?

Sirley Vannesa López adelantaba octavo semestre de Licenciatura en Literatura en la sede Palmira de la Universidad del Valle. Tenía 22 años y recientemente se había unido a un colectivo feminista, debido a su interés en el activismo contra las violencias de género.

“Sus amigas, sus compañeras también la recuerdan como un solecito, una persona que daba calor. Era una persona muy aplicada para el estudio, muy inteligente y siempre tenía una sonrisa hermosa”, mencionó Michel.

“Cuando rotan fotos de ella a blanco y negro les he dicho que la coloquen a color porque es una persona que daba color no solo a mi vida, sino a todas las personas que tenía a su alrededor”, añadió.

En horas de la tarde de este lunes, 12 de mayo, los estudiantes, en compañía de colectivos feministas y otras organizaciones que se han sumado, llevarán a cabo una “mística”, espacio de velatón a las 6:00 de la tarde a las afueras del plantel de Palmira.

Las exigencias de los estudiantes

Una de las discusiones que ha surgido tras los hechos es cómo un hombre armado logró ingresar a la sede universitaria. Así lo explica Emanuel Cubides, estudiante de octavo semestre de Psicología y quien forma parte del comité de derechos humanos.

“Hay un debate impresionante sobre el tema de seguridad porque desde la concepción de lo público, la Universidad es un espacio abierto a la comunidad, acá la gente viene y habita el campus”, señala el estudiante.

De ahí su llamado a implementar estrategias que permitan el de las personas a la sede, sin que esto represente un riesgo para la comunidad universitaria. No obstante, advierte que la seguridad no solamente se puede reducir al porte o no porte de armas o del carné estudiantil, pues, incluso, el agresor al ser estudiante inactivo podía tener el documento.

“La seguridad trasciende a una problemática social que tiene que ver con el machismo, con los feminicidios y con la violencia sistemática. ¿Por qué se tuvo que esperar a que sucediera algo así para actuar?”, cuestionó.

Y añadió que aunque la Universidad del Valle tiene una ruta institucional para los casos de violencias basadas en género e incluso dependencias para seguridad, desde su perspectiva, este tipo de dinámicas no se han desplegado en las sedes regionales.